Archive for agosto 5th, 2009 | Daily archive page
Esta fué la experiencia que supuso para unos cuantos amigos bucear, en apnea, sin más visión que el haz de luz de la linterna y un poquito de luna que asomaba de vez en cuando entre las nubes.
Nada tiene que ver la inmersión diurna con la que podemos experimentar de noche: La fauna, por ejemplo los sargos, de día huyen antes que puedas tan siquiera verlos, mientras que de noche puedes tocarlos. De día, no ves tiñosos (cabrachos), de noche, salen a tomar «la luna». Los mariscos, que de día se esconden en lo más oscuro de las oquedades, de día salen de cacería. La fluorescencia del propio agua en la noche que cuando la agitas, luce debido al plancton y el fitoplancton que se enciende y recuerda la luz de las luciérnagas.
Una experiencia muy recomendable aunque, como es normal, hay que guardar mucha más prudencia de la que guardamos de día. Recomendable es también llevar dos linternas mejor que una y no bajar muchos metros, porque nos podemos desorientar, de ahí que sería interesante conocer el lugar previamente y entrar con la mar en calma, por supuesto nunca solos, claro.
Las anécdotas de la aventura nocturna fueron comentadas entre bocados y culín tras culín de sidra hasta las tantas de la madrugada del viernes 31 de julio de 2009. Para recordar siempre.