Decía la información de eltiempo.es que la mar daría una tregua para el lunes, después de varias semanas con la mar imposible por grandes olas, y vientos sin tregua. Disfrutábamos en dique seco, con comilonas y merendolas y el metro que anunciaba nos parecía ya el momento apropiado para retomar la pesca submarina con cierta garantía de que dejara disfrutar.
Ya al salir de puero, el agua del Arbeyal era un completo barrizal, aunque pensamos que la culpa más que del temporal es de la draga que no acaba de extraer material del fondo. Salimos fuera y las olas empezaban a crecer y, como decimos muchas veces los metros del invierno, son mayores que los que se anuncian en verano.
Espumeros por todas las orillas, sin poder arrimarnos Avelino y yo que íbamos solos a bloques ni paredes sin tener que arriesgar más de la cuenta. Un pequeño repaso al «caribe» zona totalmente cerrada al mar bajo el faro de El Musel pero debe estar también al pescado, porque ni un solo pez vimos allí.
Avelino sacó de la espuma de los islotes de los «baixos» estas 3 piezas y dimos, ante el frío exterior reinante, por terminada la jornada, en espera de una calma que nos deje volver.
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